La Segunda Carta

Carta a los lectores. Queridos amigos de Cazarabet: nuestro país imaginario sigue más o menos igual, pero siempre hay cambios. Aquí los cambios los producen los aires  que se desarrollan según los libros que nos llegan. Hay días en los que la frágil calma nos despierta y pronto se desliza una brisa desde un libro de cuentos libres y sutiles; hacia el mediodía los restos de un patrimonio industrial , no tan lejano, nos sumergen en una especie de añoranza….Aquí la brisa se supera a sí misma y recoge todo su carácter.En la sobremesa, apartamos libros y teclado y leemos la prensa…..lo que normalmente nos aporta la toma de un antiácido. No hay buena digestión con el papel con el que envolvemos las tripas del pescado. En País de Cazarabet el pescado llega por carretera tres días a la semana….así que nuestras manos acogen algún libro-guía de nuestra naturaleza, pueblos y gentes…Por la tarde leemos y leemos para saber aquello de qué poder hablar y, por supuesto, qué poder ofrecer….nos gusta hacerlo disfrutamos rodeados de tantas firmas que expresan a veces tantas miradas sobre un mismo acontecimiento; pero por desgracia, muchas veces es triste. La noche ya hace horas que está cerrada….el entorno vital está dormido y en silencio, nosotros todavía habitamos nuestro país particular….por fin las ninfas y duendes de Cazarabet entran en acción y acabamos todos tirados en un colchón y abrigados para leer lo último del día…..escogemos alguna lectura plácida y sonreímos a un hipotético sol que se ha mutado a luna….Afuera en el escenario frío de una noche en Cazarabet brillan las luciérnagas  ante una casa donde las palabras se distribuyen entre un mundo diverso y que palpita libremente.